martes, 12 de agosto de 2014

Solo por hoy


“La vida es una mier…” (si, esa bella palabrita)

Así me la pasaba pensando pocos días después de dar mis tan queridos exámenes finales.  Y como no pensar así si terminas enfermándote en plenos exámenes y eres obligado a recuperarlos aun en un pésimo estado de salud. Y se pone peor cuando ves que tus notas no resultaron tan buenas en esas evaluaciones…  ¡En fin!

Bien… Empezaron las vacaciones y aun no había mucho que hacer. Jugar algo por ahí, ver películas, salir a aniquilar mi hígado con mezclas exóticas de tantos tragos que ya ni recuerdo donde estoy al final de la noche (Exagerando, claro… ¡je!) y cosas así.

Aprovechando mis días libres, me propuse arreglar aquella zona devastada por innumerables desastres naturales (según mi madre) que yo ya cuarto. ¡Ja!
¡Papeles, papeles y más papeles! Libros que no he utilizado en años, lentes de sol, plumones, fotos… de todo lo que uno puede imaginarse enterrado bajo lo que llenó siete bolsas de basura (si, fueron siete al final). Pocas cosas sobrevivieron. Entre ellas, reapareció una serie de libros que tiempo atrás fueron mi saga favorita: The Immortals. Eran seis libros, de los que solo pude conseguir cuatro en físico. ¿La historia? Chica que conoce a chico, se enamoran y son felices para siempre. Típica historia juvenil con seres inmortales, lecturas de mentes, manifestación de objetos, fantasmas, viajes al pasado, magia, aura y un elixir de la vida eterna. Bastante clásico, diría yo. Pero, hablaré de ello en otra oportunidad.
Lo que llamó mi atención al final de la limpieza (y el motivo de la entrada) fueron unas pocas páginas impresas con las diapositivas de mi exposición de un curso, Terapias alternativas. El tema, REIKI.

Bien, algo corto del tema:
REIKI: Técnica de curación mediante imposición de manos. Se busca la canalización, liberación y circulación de la energía propia de la persona y del universo. Y no todos pueden hacerlo (Naces con el don o no).
Entre las enseñanzas del fundador de esta técnica, el monje zen Mikao Usui, se difundió un escrito con cinco principios, del maestro zen hacia sus alumnos:



                           Solo por hoy…
                               … no te irrites
                               … no te preocupes
                               … se agradecido
                               … trabaja con diligencia
                               … se amable con los demás.



El pasado es algo que ya ocurrió, no es posible modificarlo. El futuro aun no ocurre, el fruto y consecuencias de lo que hagamos. El presente es lo único que existe, y donde es posible actuar.

Por eso, solo por hoy:
No te irrites,  aun si la vida escapa de nuestro control. No hay necesidad de controlar todo lo que ocurre. El miedo a lo desconocido puede llegar a ser paralizante, pero es necesario relajarse y confiar en que las cosas pueden salir bien.
No te preocupes, todos nos hemos equivocado en algún momento de nuestras vidas. Es difícil tomar las cosas con calma cuando temes que las consecuencias de tus acciones pueden aplastarte en cualquier momento. Pero, ya sea por algo que hicimos o por algo que está por ocurrir, no es posible cambiar estos eventos. Solo mediante el continuo aprendizaje de lo que la vida nos presenta, es como salimos adelante.
Se agradecido, no importa si lo que la vida y los demás nos dieron fue poco o mucho. La vida recompensa a aquellos que agradecen y valoran lo que se les da. A veces pueden llegar objetos de gran valor o momentos felices, quizá la vida decide que lo mejor son experiencias que nos permitan crecer. Todo ello, en conjunto, nos permite dar pasos más firmes hacia un futuro si es que valoramos cada momento, experiencia o recompensa de la vida.
Trabaja con diligencia, pues todos cumplimos un rol en esta vida. Es importante darlo todo en cada labor que realicemos pensando en el beneficio que otorgaras, y no tanto en el que recibes. Con ello, no solo se abarca a lo laboral, sino también a trabajar sobre uno mismo. El ser humano crece como persona si se permite pensar en sus acciones y emociones, mejorar aquello que aun puede ser mejorado y preservar lo que debe ser preservado.
Se amable con los demás, aun si no lo son siempre contigo. Una palabra o hecho puede influir en gran medida en la vida de los demás, alegrando o empeorando su día. Es sencillo, si mejoras el día de una persona, esa persona podrá hacerlo a otro y así, hasta el punto que ese buen ánimo pueda incluso volver hacia a ti cuando lo necesites. Lamentablemente, lo mismo ocurre si tus actos son para perjudicar o dañar a otros. Da qué pensar, ¿no?

Es por ello, que el día de hoy es el día más importante de nuestras vidas, ¡siempre!
Solo por hoy…


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Nota 1: Se supone que debes colocarte en la posición de piernas cruzadas Gassho (palmas tocándose) y meditar en estos principios.
Nota 2: No, no se aplicar el Reiki. Pero si masajes relajantes, energéticos, con piedras y bambú (baratito nomas! xD)
Nota 3: Se acaban mis vacaciones. ¡Por fin!

2 comentarios:

  1. Waaaaa creo que se borró mi comentario al ingresar mi cuenta T.T buuu en resumen (porque había escrito bastante). Las terapias alternativas requieren fe y creer que lo que estás haciendo te hará bien sí o sí. Sin embargo por las normas del REIKI yo lo consideraría La terapia universal.

    Se entendía mejor antes, pero escribir todo de nuevo ¡qué flojera! XD. Un abrazo!

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    1. La terapia convencional requiere de que el paciente crea que lo que hace le ayudara. Para las terapias alternativas, también quien las aplica debe creer en lo que hace, sino solo pierdes tiempo valioso xD

      El repetir los principios cuando sean necesarios ayuda muchísimo. Empece a aplicarlos y se alcanza una calma... hahaha recomendado!!

      Un abrazo! :)

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